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Lo ideal para tener una testudo hermanni en cautiverio, es vivir en la playa desde el levante español hasta Cataluña y tenerla en un jardín amplio, con obstáculos, con montículos, con césped, plantas de todo tipo, zonas con sustrato de turba, con zonas asoleadas, con zonas de sombra, agüita que no le cubra por encima del plastrón, una valla a prueba de fugas (ya que escalan que da gusto), etc. Pero la realidad de la mayoría de las personas que mantienen una hermanni en cautiverio no es esa.

Sí que es cierto que debemos procurar darle al animal sol directo y aire fresco si nos es posible, cuando el sol atraviesa una ventana los rayos UVB se filtran y no llegan, para una tortuga es estrictamente necesario tener exposición directa a este tipo de rayos, si no es así no podrá asimilar el calcio que va a obtener de los alimentos que le demos y enfermará con seguridad a medio o largo plazo. Si mantenemos al animal al exterior sí que obtendrá estos beneficios del sol, pero entonces la tendremos expuesta a alimañas, aves y otros peligros. Lo ideal cuando una tortuga no tiene un tamaño considerable (hasta cinco o seis años) es mantenerla en un terrario, cuando son pequeñas es necesario tenerlas a resguardo.

Detalle de las cubiertas


Si el terrario es exterior procuraremos darle espacio (el máximo necesario), tener tapada la parte superior con una rejilla metálica y proporcionarle cobijos para cuando el sol apriete, procuraremos poner un sustrato que aguante la humedad (turba o fibra de coco que nos venden en los viveros) mezclado con mantillo o tierra, esto hará que se pueda enterrar cuando quiera, cuando tenga frío o calor, procuraremos que ese sustrato se humedezca de vez en cuando, si es verano lo haremos a diario dadas las altas temperaturas, si es primavera u otoño, con las inclemencias del tiempo será suficiente (siempre y cuando las haya lógicamente). Lo importante es que ese sustrato esté húmedo por debajo de la primera capa (húmedo y no chorreando ni encharcado). Sería bueno plantar algo de trébol, césped, y plantas del tipo hibiscos, las devorarán. También será bueno poner algún escondrijo del tipo maceta o corteza de corcho para que puedan refugiarse. La temperatura exterior deberá oscilar en estas condiciones como mínimo por encima de 14-15 grados y como máximo por debajo de 40-42 grados. Por debajo de 14 grados la tortuga entrará en un estado de aletargamiento y veremos como pierde actividad, por encima de 36-38 grados la tortuga estivará, pero los refugios que le pondremos precisamente intentarán evitar esos extremos de temperatura, para que el animal se encuentre entre los 20 y 32 grados que es la temperatura ideal para mantener al animal en su época de actividad.
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Terrario exterior


Si mantenemos al animal en el interior de casa, todas estas condiciones que comento antes deben ser imitadas artificialmente. Debemos instalar en el terrario tubos o bombillas para reptiles y calefactores adecuados. En la mayoría de mis terrarios la luz que utilizo es de tubo fluorescente con intensidad del 5% de rayos UVA, en un extremo del terrario coloco una bombilla tipo spot (como las de Philips que venden en todos sitios) que orientan la luz y el calor a la vez a zonas concretas, de manera que provoco zonas de temperatura más alta que el resto del terrario (en torno a los 32º) y así dejo que puedan ir a zonas más frescas (que mantengo a unos 20-24 grados) ya que también instalo bombillas cerámicas que junto a un termostato hacen que la temperatura no descienda de ahí. Pongo bombillas cerámicas porque no dan luz y por la noche me mantienen el terrario calentito a la temperatura deseada. Al igual que al exterior, aprovechando que con la luz de los tubos las plantas también crecen, planto césped, trébol, hibiscos, etc., intento imitar ese hábitat que tendría fuera. El éxito del mantenimiento de esta forma está garantizado. Un aspecto importante a tener en cuenta es que el terrario de una tortuga no se calienta por abajo (con cables y alfombrillas calefactores que se entierran bajo la tierra) como ocurre con otros reptiles, el calor siempre les debe venir desde arriba, como el sol, por eso ponemos bombillas tipo spot. También se pueden utilizar lámparas de vapor de mercurio, que proporcionan UVA y calor a la vez, aunque los resultados con este tipo de lámparas son excelentes, también hay que decir que el consumo en vatios es más del doble que de la otra forma, con un terrario solamente no es un problema pero cuando tienes nueve la cosa cambia…

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LA HIBERNACIÓN

La hibernación es un sistema de protección que tienen muchos animales para protegerse de las inclemencias del clima, como reptiles que son, las tortugas son animales de sangre fría, no tienen mecanismos de termorregulación como los mamíferos, necesitan que haga calor fuera para que su organismo se encuentre activo. Cuando la temperatura desciende de forma continuada de 14-15 grados, empiezan a entrar en un estado de letargo que ralentiza sus constantes vitales al mínimo no consumiendo prácticamente ninguna energía, esa temperatura en la que se encuentran en este estado de forma continua está entre 5-12 grados. Si el animal está prolongadamente entre 10-15 grados no entrará en letargo profundo con lo que sí que consumirá recursos, entonces corremos el riesgo de que el animal consuma demasiadas reservas y llegue a morir por inanición y deshidratación si esto se prologa durante meses. Si la temperatura desciende por debajo de los 2 ó 3 grados, corremos el riesgo de que sus ojos y otras partes de su organismo se semi congelen, con lo que eso supondría. Por eso, estos animales cuando empieza el Otoño y la temperatura empieza a descender, ellos solos dejan de comer, empiezan a limpiarse por dentro y se preparan para esa fase traumática de su vida en la van a permanecer inactivos durante casi cuatro meses. Cuando llega el momento, se entierran en la mayoría de los casos hasta una profundidad en la que ellas se sienten cómodas puesto que la temperatura que hay debajo de tierra se mantiene mucho más constante y sin tantas oscilaciones como la que hay en la superficie.

Es curioso, las boettgeris que tengo, ya a finales de septiembre y principios de octubre están prácticamente enterradas, sin embargo las hermannis hermannis tardan más en hacerlo, pero es que dentro de las hermannis hermannis unas tienen hábitos de enterrarse durante el año y otras no, y esas que se entierran durante el año en esta época que comentamos no lo hacen. En definitiva, cada animal percibe la temperatura en función de su masa corporal y adopta la situación que más le conviene.

Aunque tengo la posibilidad de dejar a los adultos hibernar fuera, no lo hago por precaución frente a las ratas y alimañas, ya que tenemos que tener en cuenta que estos animales en estos momentos están completamente aletargados y cualquier animal puede hacer con ellos lo que quiera, pudiendo, prefiero no correr riesgos. Meto a los animales en cajas de madera con un sustrato tipo turba que pueda mantener un cierto nivel de humedad y las meto en un cuarto exterior que tengo donde la temperatura desciende pero no bajo cero. Ellas se entierran en el sustrato bajando hasta la parte más baja de la caja donde encuentran una temperatura adecuada y la tierra que las cubre las amortigua del frío. Esto lo hago cuando después de varias semanas de verlas que no comen, empiezan a entrar en ese estado de letargo. Si no hay hibernación por el motivo que sea o esta es muy corta, el éxito reproductivo al año siguiente es muy bajo. Pero cuando detecto antes de hibernar que alguna no se encuentra en condiciones óptimas, porque la he visto baja de energía, apática o con síntomas de algún tipo de enfermedad, no las hiberno, porque la probabilidad de que no se vuelvan a despertar es altísima. De hecho, es muy conveniente pesarlas antes de la hibernación y regularmente con mucho cuidado durante el período de hibernación ir pesándolas cada 20-30 días para controlar el peso, si vemos que desde el principio alguna está perdiendo más del 10% de su peso antes de aletargarse, es necesario despertarla porque algo va mal y es posible que no despierte. En este caso la cogeremos y la pondremos durante unas horas expuesta a un foco de calor que iremos aumentando gradualmente desde 20 a 32 grados en unas horas, inmediatamente la veamos despierta la bañamos prolongadamente en agua templadita para que se hidrate y seguramente hasta unos días después no empiece a comer, pero no importa siempre y cuando pasados unos días empiece a comer. Los baños deberemos dárselos con frecuencia pues la hidratación es fundamental.

Las crías el primer año no las hiberno, mucha gente lo hace, también esta gente que lo hace comenta alguna baja, en mi caso, ninguna, el segundo año las hiberno un mes, al tercer año un mes y medio, al cuarto año y dependiendo del tamaño y peso del ejemplar acompañan a los adultos o solo hibernan dos meses. Con cinco años el animal hace su hibernación normal y corriente, desde el mes de Noviembre hasta principios de Marzo.

La hibernación es un proceso duro para los animales, por eso tenemos que procurar que sea lo más llevadero posible. Pensemos que el animal se estanca por completo durante varios meses y ni come ni bebe y tan solo tiene varias pulsaciones de su corazón por minuto.